Cuando leí el blog gabo, me di cuenta que no era la única pensaba en mis amigos, y sobre todo no era la única que escribía sobre David, solo que yo lo hacia secretamente, aveces pienso que haría si estuviera aquí, si todavía manejaría como trastornado, que si hubiera comprado una moto me hubiera enseñado a usarla, pero también pienso en las platicas que tuvimos las veces que me cedió su cama para dormir, los jardines donde miramos la luna y platicamos los tres, los tacos que comimos, que su mamá me sentará a la mesa y a él no, que me dijera que me desperdiciaba mi talento, que me confrontará cuando mas triste estaba, que me escuchará y se emocionara más que yo cuando alguien me gustaba.
Nadie nos enseña que cuando pierdes a un amigo duele, duele de un modo diferente, es un dolor que no puedo explicar pero se rompe el corazón, se rompe muchas cosas, la sonrisa se me rompió, se me rompieron tantas cosas, mi forma de ver la vida, arruino noviembre para mi y ahora ha pasado el tiempo y sigue doliendo
Aunque sea una cosas totalmente distinta ahora que pierdo a un amigo, no es que muera, sino que se aleja de mi, sin saber porque lo hace, duele no de la misma forma, pero duele, pero no puedes obligar a los amigos a que sean tus amigos, lo único que queda es darles su espacio, quizás algún día vuelvan, quizás no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario